Quizá muchos no lo sabéis... la mayoría seguro que no... Pero la verdad es que antes de dedicarme al mundo de las bodas trabajaba para empresas, como diseñadora gráfica y web y en ocasiones también como consultora de marketing.
En esas consultorías, a la mayoría de emprendedores que venían a verme les insistía en lo importante que es tener un blog para el posicionamiento de la web y sobre todo, de mantenerlo, de alimentarlo de contenido de forma periódica.
Y aquí estoy, con un blog en el que no tengo tiempo para entrar, ni para escribir, ni para programar cómo crear contenido... 👹
¿Están los blogs destinados a morir después de tantas redes sociales?
Supongo que no, pero es cierto que la forma en la que se los usuarios se conectan o llegan a esos blogs sí que ha cambiado, y está claro que lo seguirá haciendo...
En el día a día no tengo tiempo de crear contenidos, preparar imágenes, etc. Es muy difícil mantener un diario digital de estos...
Y en cambio a mí siempre me ha gustado mucho escribir, pero cuando me enfrento a escribir sobre algo en particular me quedo en blanco. ¿Alguien más a quién le pase esto?
En fin, voy a proponerme darle continuidad a este blog para ir contandoos cosas interesantes sobre las bodas y también sobre el apasionante mundo del emprendimiento, que es igual de apasionante...
Sweet kisses!